«Sólo sabemos contar afirmaciones
o negaciones, cabellera de noche,
Sólo sabemos invocar como niños el frío
Por miedo de irnos solos a la sombra del tiempo».
Las aves, ¿llegaron a tener plumas y alas porque querían volar? (lo acabo de leer en un blog).
Seremos tan taxativos para en cada momento producir levitaciones y letargo.
Pensar por una dilatación del yo, y ya somos capaces de fabricar ideas creadas a semejanza de la compleja realidad.
Tuve la suerte de, haber tenido buenos maestros a los cuales siempre escuche y cite.
Me enseñaron que entre la filosofía y una ciencia específica existían un conjunto de teorías que, más bien, eran metodologías «cristalizadas» para poder ordenar de manera lógica las ideas que se relacionan para formar cuando se interconectan una teoría aplicada a un campo específico.
En aquella época de los 80, en que se estudiaban los problemas filosóficos de las ciencias, (Burguete, Kedrov y otros) y que posteriormente llegó a abrir un abanico de mayores problemas, como: los problemas sociales de las ciencias. (Núñez).
Habían conocimientos generales que se aglutinan en: la teoría de la información y de la teoría de la cibernética desarrollada por los 40 por Norbert Wiener, la teoría general de los sistemas, formulada por Ludwig von Bertalanffy que venia avanzando desde los años 50, seguida de la teoría sistémico paramétrica.
Las teorías de las estructuras disipativas, Prigogine en los 60.
Posteriormente, Edward Lorenz llego con teoría del caos. Indeterminación y azar, más bien determinación y azar.
René Thom.
Que nos ayude Wikipedia.
El comportamiento complejo representa una situación intermedia entre un estado ordenado y otro totalmente desordenado. Jorge E. Miceli, Sergio G. Guerrero, Ramón A. Quinteros, Diego Díaz, Mariano, Jordan Kristoff y Mora Castro.
Y podemos seguir con Barabasi Laszlo y Eric Bonabeau. También, y porque no, Gregory Bateson.
Sistemas complejos que se hallan en una situación de complejidad.
La crisis de los paradigmas de K. y las ideas de Morin.
Para aliviar el camino de lo que traigo recordemos a Charles Bukowski en su zaragatero realismo sucio, cuando escribiendo sobre los filósofos pensó en los dolores de cabezas que debieron de sufrir, Kant, Hegel, Sartre y otros.
En fin con sus antecedentes actuales expuestos en Perspectivas del estudio del comportamiento complejo de los fenómenos en el Universo de la Cultura Física de, Santiago León Martínez y que concluye como tantos otros autores en esta línea. La necesidad de la interdisciplinariedad, de la pluridisciplinariedad, de la transdisciplinariedad para el estudio de la complejidad, (Sotolongo Codina, en Cuba) abordar cualquier sistema complejo, como lo es el hombre. El deportista. Y decir que se puede predecir el rendimiento, el resultado, es mas predecir la eficacia, con un conjunto de variables psicológicas es derrumbar y no considerar esta pirámide de pensadores.
Wiener, lo dijo, el ser humano es un sistema híper estable.
Para preguntas escríban le a José Ramón López Rodríguez.
Uno de mis maestros.
Es muy difícil predecir sobre la actuación tanto en la arena deportiva, podemos estar entrenados y preparados, con el mejor entrenamiento físico, técnico, táctico, mental, y entonces, nos puede fallar y atentar contra la victoria o el éxito cientos de factores. Pregúntenle: al entrenador, al árbitro, a la audiencia, a los músculos, a la mente y hasta aquella paloma que, con sus alas tropezó con la pelota y hasta al viento que batió más fuerte en dirección inesperada.
Esto no niega el conocimiento, ni la ciencia. Le damos y el deportista reconstruye activamente una gama de recursos para utilizarlos con el objetivo de asegurar su actuación. Los resultados son otra cuestión.
No es una rancia crítica sesgada. Es realidad.
Saludos.
Dr. Francisco Enrique García Ucha.